Una Comunidad Energética es un concepto social, una agrupación de consumidores de energía renovable, cuyo objetivo es ahorrar, cuidar el planeta, y crear comunidad, en base a un nuevo modelo energético justo, donde sus integrantes deciden directamente cómo producir, gestionar y utilizar la energía.
Las Comunidades Energéticas persiguen el beneficio de los vecinos y asociados (particulares, empresas o entidades) a través de la reducción de los costes energéticos y la adquisición de hábitos de consumo energético más sostenibles, además de generar otras medidas que puedan mejorar la eficiencia energética y el bienestar de la comunidad.
Una Comunidad Energética PUEDE:
- Generar energía a partir de fuentes renovables.
- Compartir, suministrar, almacenar y distribuir la energía generada.
- Proporcionar y prestar servicios de eficiencia energética, como la rehabilitación de edificios y la recarga de vehículos.
Una Comunidad Energética OFRECE:
- Beneficios medioambientales, al tratarse de un modelo energético cero emisiones.
- Beneficios energéticos, al reducir la dependencia de las fuentes de energía convencionales.
- Beneficios económicos, creando oportunidades de inversión para los ciudadanos y comercios locales, y reduciendo la factura eléctrica.
- Beneficios sociales, generando empleo local y fomentando la cohesión y la equidad social a través de medidas concretas para abordar la pobreza energética.